Inmersos ya en las Fiestas del Pilar, nuestra orientadora, Cristina Bravo, nos da unas pautas para afrontar estas fiestas con hijos adolescentes.

¿Qué herramientas podemos dar a nuestros hijos para que cuando estén de fiesta con sus amigos sepan qué decirles, si ellos no quieren beber alcohol? ¿Cómo enfrentar esas situaciones que seguramente se puedan dar dentro del grupo de amigos?

-“Es normal que como padres/madres, en las primeras veces que nuestros hijos/as van a salir, tengamos, miedo, preocupación, angustia….

Por este motivo, no debemos esperar a que llegue ese momento, para comenzar a darles unas pautas de cómo deben comportarse, sino que por el contrario, debemos de enseñarles, que deben ser ellos/as mismos/as los que decidan lo que quieren hacer, sin dejar influenciarse sobre lo que hacen los demás, de esta manera conseguiremos que en estas primeras salidas, sean capaces de poder decir que “no” a los amigos/as que les invitan a fumar o beber o a realizar cualquier otra actividad, que quizá no les apetezca hacer, y por no tener asentada una buena autoestima, o por miedo a que le dejen de lado, acceda hacer algo que realmente no quiere.

En cualquier caso, debemos aconsejar a nuestros hijos, que los verdaderos amigos/as, son los que respetan tus decisiones, sin forzarte hacer cosas que no quieres y que ellos son los que deben decidir lo que hacer, puesto que serán los que deban asumir las consecuencias.

Entiendo que todo lo que escribo, a todos los padres/madres, nos cueste, pero nuestros hijos/as deben de sentir que confiamos en ellos, que creemos que pueden cuidarse estando lejos de nosotros, a la vez que deben saber que si pasa cualquier cosa, que no se preocupen que cuenten con nosotros y sobre todo que nos llamen o acudan a casa”-

¿Cómo debemos actuar si nuestro hijo o hija llega a casa y notamos que ha consumido alcohol?

-“En el caso en que nuestro hijo/a vuelva  a casa y notemos que ha bebido, pero veamos que no tiene peligro el que se vaya a dormir, es aconsejable, dejarle que duerma, que descanse, puesto que en esos momentos, no está en disposición de prestar atención a lo que le queremos decir.

Es mejor que al día siguiente, comencemos una conversación sobre la noche anterior, preguntarle qué tal fue la fiesta, qué tal se lo pasaron y poco a poco introducir el tema del alcohol, para que con calma, desde la información y desde la importancia de la salud, comiencen a entablar una conversación, sobre qué es el alcohol, qué consecuencias tiene y qué repercusiones puede acarrear su consumo, en este caso, sería bueno, el poder apoyarse en el folleto que el CMAPA (Centro Municipal de Atención y Prevención de Adicciones), ofrece a las familias, para que entre todos puedan leer y valorar la información que nos ofrecen los profesionales que conocen este tema.

Tras la conversación, desde casa se les puede comentar la opinión que tienen ellos como padres, sobre el consumo del alcohol, para que su hijo/a, tenga clara la opinión de los padres y en el caso que lo crean conveniente, puedan pactar unos límites claros sobre las consecuencias que tendrá en casa, si no respeta los límites marcados, para que de esta forma su hijo/a, pueda conocer claramente no solo la información profesional sobre el consumo de alcohol, sino también las normas que hay en casa con respecto a este tema, y por lo tanto ser responsable de su comportamiento, asumiendo las consecuencias.”-

¿Es aconsejable acordar con ellos los lugares a donde pueden ir o no?

-“Es importante  hablar con nuestros hijos sobre dónde van a ir, quizá aconsejarles los sitios que creemos son los más adecuados para ellos, pero sobre todo, decirles que no se queden solos, que vayan siempre en grupo y que en el caso que alguno de ellos/as les ocurra alguna cosa, no le dejen solo/a sino, que le acompañen y llamen a los padres, para que sean ellos, los que vayan a recoger a su hijo/a y tomen la decisión que crean más oportuna.”-