Tras leer su libro “Tras la sombra del brujo”, los alumnos de 3º de Secundaria han tenido un encuentro con el escritor.
Por Redacción Zaragoza
El alumno, Miguel Ángel Ballonga (3º A) ha escrito un artículo sobre ese encuentro:
-“El lunes día 12 de Marzo del 2018 vino a visitarnos el escritor Francisco Díaz Valladares, nos habló de su vida, que nació en Sevilla; que tuvo varios oficios, el primero fue de trasladador de ataúdes, luego trabajó de carpintero, cartero, pintor, arquitecto…, tuvo todos estos oficios antes de darse cuenta de que quería ser escritor.
Toda su vida estuvo influenciado por su abuela que le dijo muchas frases sabias que le ayudaron en su vida, y a llegar a lo que llegó. Frases como: “Que te llamen loco pero no tonto”, “Araña la vida, súbete a todos los trenes que veas, y si no te gusta, bájate en la siguiente estación”. Su abuela también le enseñó la forma de hacer las cosas “Cuándo quieres algo, coge un clavo del 10 o del 12, ponlo en una madera y clávalo hasta que la cabeza esté a ras de la madera”. Él, junto a ella, tenían una filosofía llamada “filosofía del desprendimiento”, la cual se basaba en “si la mochila está muy llena, la pones encima de la mesa y sacas lo innecesario”.
También tenía para sí, una frase de Sócrates: “No se es sabio, si no se es bueno, y no se es bueno, si no se es feliz”.
Su nombre tiene una anécdota que es que cuando llevó a sus hijos al colegio, en una de las reuniones, al salir, tenía que firmar como que había ido, y firmó como “Paco”. La encargada le pidió que firmara con su nombre completo, a lo que él le dijo: ¿seguro? La encargada le dijo que sí, y al firmar, la encargada se quedó sin palabras..,
Parte de su metodología es: “Hay que salirse del grupo para ver los problemas desde otra perspectiva”.
Todos los veranos, viaja en barco por el Mediterráneo, un año le sorprendió una tormenta y creyó que iba a morir, pero sobrevivió, y, en ese momento, comenzó a plantearse ser escritor.
En sus inicios como escritor, su abuela le dijo: “Cuando escribas tu primer libro, no pienses que será buenísimo, piensa que puede ser mejor”. Para su abuela, que era matrona, nunca nada era urgente. Él lo aplicó en su vida, y actualmente ha escrito muchísimos libros de los cuales solo ha publicado diecisiete.
También escribía poesía, y a los 20 años, se enamoró de una chica, y le escribía poesía, pero tuvo la mala suerte de que le dejó por el sobrino del cura.
Antes de escribir un libro, intenta investigar lo máximo posible. De hecho, cuando escribió: “Tras la sombra del brujo”, se fue varios meses a África y vivió con un brujo africano, y también estuvo con los inmigrantes que intentaban llegar a Europa. Cuando escribió un libro policíaco, se pasó varios meses con la policía, y otros tantos con una banda de mafiosos.
Al escribir un libro, escribe dos. Uno que no le importa ni como escribe ni lo que escribe, y ese va a su estantería. Después hace un segundo, retomando el primero, pero bien hecho.
Para los títulos de sus libros pide a sus amigos que le den ideas.
Por su persistencia, consiguió el premio Edebé de literatura juvenil con su libro “Tras la sombra del brujo”.
Este es el resumen de la exposición de su vida y también nos firmó los libros, “Tras la sombra del brujo”.-